¿Fin?

Todo iba sobre ruedas, demasiado bueno para ser real. Atletico campeón, asignaturas aprobadas, perro madaleno e incluso una moto, tambien Capitán América se coló en mi habitación. Ahora tengo hambre pero no tengo ganas de comer, la respiracion se acelera constantemente, los múculos de mi cuerpo estan contraidos sin hacer ejercicio y el sueño no me deja dormir. Sin ganas de llorar pero tampoco de reir, pensamientos sin coherencia inundan mi cabeza y me hacen recordar otros peores. ¿Y tiene que ser en Martes? Se que lo leerá y sabe que escribo para poder desahogarme, la pena y la decepción hacen eco dentro de mí. No se que hacer, me siento insultado, estoy perdido y sin ganas de seguir. La casualidad es que siempre están entre medias las mismas fiestas y la misma persona que no le ha dejado disfrutar, reir y gozar de la vida como lo ha hecho hasta el momento. Parece que tiene un iman extraño y que no se puede separar de él, poniendo en riesgo su felicidad. No quiero ser un pringao enamorao, no voy a cambiar mi persona y mi ser. La violencia no lleva a ningun lugar, las lagrimas sin permiso no son dignas de una persona como tú, sigo pensando que no me entiendes, que no estas en mi lugar y que mis palabras y percepciones han sido en vano en mis explicaciones. Me costó mucho llegar a superarlo y vulves a caer unos cuantos peldaños, ¿No recuerdas el esfuerzo para llegar al último? No se trata de confianza, está claro que la tienes, pero hay cosas con las que no se juega. Si no hubiera antecedentes no sería lo mismo, de hecho las personas sin antecedentes no van a la carcel. Estoy siendo muy duro, sigo sin saber que hacer, que escribir o que gritar por la ventana. Rabia, mucha rabia y ninguna vacuna para los humanos. Me estoy cansando de estupideces y que las hagas sabiendo que son tonterías, pero no eres de mi propiedad. Cada persona puede hacer lo que le plazca en el momento que le apetezca, nadie por estar con una persona ha de privarse en hacer nada. Creo que no has hecho lo correcto desde mi punto de vista, pero eso no te importa. Sigo sin saber si sacarme una entrada nueva para el Arenal o ir contigo para ver a Varry Brava juntos, quitarme el citurón o apretarmelo un poco más, pasarme por tu casa a recoger mis cosas o quedarme a dormir para hacerte el amor por penúltima vez. Lo que si que tengo claro es que no quiero volver a sufrir de esta manera por ti.