Verano, mal tiempo para para los fetichistas. La observación se hace minuciosa, te distraes y opinas en tu interior de colores, estética, marcas... No paras de mirar el suelo, pero lo que no sabes es que lo haces por egocentrismo, superhombre.
Frikismo absoluto en viajes cortos, bicis caras y tatuajes mentales con dos seguros, uno de moto y otro de vida.
Llegó el momento, llego el verano. Calor, agua fria, piscinas mojadas y terrazas petadas. Poca ropa que nublan nuestros pensamientos más superfluos y, como no, aire acondicionado.
Sexo pegajoso, sudores que causan verguenza, cachitas de gimnasio y gafas de sol, las de moda.
Planes, muchos planes. Barbacoas, juegos de cartas y apuestas atrevidas. Días largos, atardeceres increíbles y fiestas de pueblos, somos españoles.
Camisetas de tirantes, bikinis y natación sin gorros de latex.
Vuelta a la realidad, España eliminada del Mundial.
martes, 24 de junio de 2014
Pero da igual.
viernes, 6 de junio de 2014
2º Round parte enésima.
Y ese punto de tranquilidad momentaneo no es un espejismo. Tampoco lo son esos pensamientos que no me dejan dormir, como los cangrejos hago honor a mi signo del zodiaco. Enfermedad que se llevó a los más grandes y a los más debiles, sin avisar.
Lágrimas en la distancia y olores péstidos del pasado en una semana para olvidar, pero aún no ha terminado. Marcado con tinta negativa, locura transitoria en un mundo egoista motivado por los impulsos, por la gente oscura de corazon turbio.
Confusión entre incondicionalidad, fidelidad y lealtad, así nos va, mandarineando y guiñando los ojos cuando no hay luz, cuando nadie mira.
Presupuestos en el departamento del amor, Ejecutivo de cuentas en un mar sin comunicación, sueños rotos y esperanza ciega.
El gato se hizo tigre.