lunes, 4 de enero de 2016

Cavuevo

Hacía tiempo que no nos veíamos. Me tuve que despertar temprano y viajar en transporte público para hacerlo.
Estaba saturado, necesitaba unas vacaciones, aunque había pasado solo un día de su último viaje.
La espesura corría por sus venas, tenia mirada de pocos amigos bajo una cara descansada, sin sueño.
Sigo sin saber dónde estaban sus pendientes, por qué llevava esos ropajes y cómo lo había hecho para llegar hasta allí.
Se le veía sólo, con las mismas zapatillas que cuando lo conocí y con esa cazadora tan peculiar. Fue impresionante saber de su existencia, no estaba tan lejos como me dijeron.

No hay comentarios:

Publicar un comentario