Dientes

Esas sonrisas provocadas en el metro dicen estar de acuerdo con lo que dice ese señor.
Guitarra en mano, y con un punto de locura, esboza peciosos mapas en la cara de la gente.
¿No se dan cuenta de que necesitamos reir? ¿Que la vida la mueve el amor, la amistad y una buena carcajada?
Basta ya de crisis y de dioses, pon banda sonora a tu vida, a los momentos y a esos segundos que se marchan en silencio al sonido de un tic tac.
No hay nada más bonito que esa curva que va de oreja a oreja, esas arrugas involuntarias y que nos esforzamos en disimular. No te engañes, están ahi para recordarte que tienes motivos para reir.
Un chiste, un poema o una simple mueca, tu eliges. Un payaso, un resbalón o un guiño inesperado, tu decides. Estamos aquí para pasarlo lo mejor posible, en soledad o en compañía, da igual. Lo importante es disfrutar.
Coge aire, grita al mundo, haz deporte, observa a tu alrededor, juega limpio, salta, siente, conoce, haz el amor, pero porfavor, ríe.

No puedo más contigo

Y era ella

Pendientes diferentes en cada oreja. Agujeros de más para ser exactos.
Marteens en dias frios y lluviosos, sandalias en un verano abrasador.
Anillos en sus largos dedos, en ambas manos. Pulseras y collares también.
Paso firme, mirada dulce y sonrisa positiva.
Ojos especiales, pero no de cristal. Gafas los ocultan en dias despejados.
Voz aguda determina su felicidad, oscura en las mañanas silenciosas.
Hermana de sus amigos, perfume de amor en su rastro.
Lectura en su mente, soledad en sus poros más profundos.
Movimientos de cadera marcados por una musica vital, por un sueño marcado por el horizonte.
Gato por animal, pero no araña.
Curvas de hielo, perfil de flores y pasos de otro mundo.
Invencible y alta. Sexo con sabor a cerveza.
Piernas largas, besos puros y labios finos.

Y es ella

Esa chica de carpeta y bolso, de botas y pitillos ajustados, del montón.
Esa que escucha lo que ponen en las discotecas más populares, la que quiere un novio para acostarse con su amante.
Va a la Universidad y es estudiante, pero no lee libros. Fuma ocasionalmente y bebe copas a pares.
Rie a carcajada limpia, ensuciando sus amistades con opiniones sin compromiso.
Brilla en sus tiempos libres con la luz más pura, cuando su pasado y su familia le dejan.
Ciudadana del mundo, cariñosa con los animales pero sin pelos en su ropa.
Maquillaje en sus pómulos y raya negra en sus ojos que delimitan su mirada más allá del horizonte.
Humana y limpia, come chicle sin mascar y hace el amor a oscuras.
Perversa ocasional, promiscua cuando selecciona Telecinco como canal. Mujer cuando se depila.
Pelo largo y tatuajes buscados en google, mechas de colores, orejas pintiagudas y de fina barbilla.
Rockera por su cazadora, cuida su dieta y le da igual beber Cruzcampo.
Drogadicta por depresión, toma la píldora sin receta, sale cuando la noche cae y vuelve en taxi.
Vuela sin alas, es libre pero lo llama freedom. Bosteza con la mano en la boca y no tiene caries.
Mueve sus caderas rompiendo el viento, su perfume deja un rastro de aire limpio y se acuesta con un pijama de colores.
Sexy por naturaleza, sus cejas se acercan a la perfección y su mundo lo tiene en el bolsillo.

Punto

Me encanta que me digan que soy grande, que voy a llegar lejos, que soy guapo, alto o fuerte por muy bajo o gordo que sea.

Me encanta ese paralelismo al escribir, ese guiño que retrocede al principio y llena la escritura de nostalgia, pero no es más que un engaño, una careta de goma dura.

Y se rompe la musicalidad, se hacen añicos los sueños en forma de mensajes electrónicos. Punto y seguido.

Punto y aparte.

Regreso al futuro

Atrás quedan esos martes mágicos, cuando eramos inocentes y no sabíamos donde íbamos a llegar. Esas tardes de besos y miradas tímidas, sin miedo a mirar al horizonte.
Atrás quedan esas cervezas plagadas de sonrisas con dirección a nuestros labios, a lo más profundo de nuestro ser.
Quizá ya no escribamos esas cartas dignas de Becquer, quizá tengamos miedo de saber que es mucho tiempo y que el tiempo nos pone a cada uno en nuestro lugar.
Acojona pensar. Pensar que todo esto puede no ser real, que aveces es tan perfecto y otras mortal. Y es en ese preciso momento cuando cerramos los ojos y nos dejamos llevar. Nos besamos, el tiempo se detiene y volvemos sobre nuestros pasos.
Invencible, grande e imantando. Digno de la fidelidad a nuestras personalidades. Loco, divertido y soñador. Digno de nuestro lugar en este mundo.
Todo esto forma parte de una nostalgia forjada con el tiempo, esa misma que será el presente mañana, la que nos hará volar y perdurar en el tiempo con los nuestros.
Batallas interiores, cruzadas nocturnas y música en nuestros pasos. Y es que aveces escribir hace la herida más profunda. Te hace recordar que estás vivo, que si duele es porque las reglas del juego no estan escritas, hay que imventarlas, dibujarlas en nuestros cuerpos con el arte de reir, con el los arte de bailar, con mirarnos a ojos y ver ese brillo que hipnotiza.
Y será paciencia, persistencia o ya no se qué. Algo que no se puede explicar, algo que rompe el aire puro de esta habitación.