Me encanta llevar la gorra hacia atrás, sentarme en una terraza y tomar una cerveza rodeado de buena compañía, pero hoy me apetece volar sin motor, vaguear como antaño y tentar a la suerte. Quizás todos los planetas se superpongan los unos en los otros a la par que un rayo de luz ilumina mi futuro apuntando a un boli y un papel.
La ilusión es la clave, pero no se donde está.
Me mareo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario